Iquique es un colectivo integrado por universitarios -estudiantes, profesores y personal de administración y servicios- que nace en 1989 como grupo de trabajo de solidaridad internacionalista.
Intentamos hacer solidaridad fundamentalmente política implicando a la comunidad universitaria en otros asuntos, fuera de los meramente académicos.
Hicimos, durante varios años, exposiciones fotográficas acompañadas de charlas sobre diversos temas o conflictos. Así tratamos El Salvador (nuestra primera actividad) y varios países de América Latina, pero también estuvo presente el conflicto del Ulster, Palestina o Sáhara. Usábamos la sala del sótano de  Filosofía, pero un mal día nos encontramos que la habían convertido en almacén. Hasta un frasco con un cerebro había allí, así que tuvimos que trasladarnos al recibidor del Inter. Precisamente allí, en nuestra última actividad de este tipo (1994), una semana dedicada a Cuba, en el cuarto de colectivos donde nos reuníamos, preparamos “artesanalmente” unos caballetes, que duraron lo justico para poder plantar la exposición. Los trabajos manuales nunca se nos dieron muy bien.
Además, también organizamos diversas conferencias y charlas, muchas veces colaborando con grupos de fuera de la universidad. Precisamente, a partir de mediados de los 90, éste ha sido nuestro principal trabajo, integrándonos en diversas coordinadoras de solidaridad.

Una campaña que estuvo muy bien fue la que titulamos: “Quinto Centenario… ¿de qué?”. Durante todo el 92 llenamos las facultades y escuelas de carteles, que cambiábamos cada semana, con textos de Galeano.
Participamos junto con otros colectivos universitarios en diversos temas, e incluso se creó una coordinadora de colectivos, que, si no recuerdo mal, llegó a sacar una revista (bueno sólo un número) con la que regalábamos un condón.
Con diversos estamentos universitarios propusimos –y se logró- el doctorado honoris causa para Rigoberta Menchú.
Estuvimos metidos en la consecución de acuerdos con universidades de El Salvador, Nicaragua y Cuba. Con la Universidad  de La Habana se creó la Cátedra José Martí y se envió diverso material informático, publicaciones periódicas y algunas cosillas más.
Otra actividad interesante fue una exposición muy bien currada sobre los GAL. Valoramos la situación y preferimos sacarla del campus y hacerla en La Vía Láctea.
Desde finales de los 90 sobrevivimos en nuestro trabajo con otros colectivos. Ya casi ni nos reunimos, aunque entre los que quedamos hay la confianza de sobra para apoyar cualquier iniciativa sin tener que consultarnos.

Lobo